Desde 2005 hasta 2022 trabajé en la empresa familiar. Una fabrica de calzado, como empleada administrativa, diseñadora y atendiendo clientes.. los días pasaron, los años también. Hasta que la pandemia de 2020 me obligó a bajarme de la rutina.
Compré un curso de pintura online, para aprovechar el encierro, sin planes. Era un juego, creo que eso me permitió desarrollarme como artista, la libertad de que no importaba lo que hiciera, el pan siempre estaba en la mesa, venía de otro lugar.
Ese fue un gran paso, dejar la seguridad del trabajo de oficina, por la aventurada vida de artista. Hoy puedo asegurarte que no me arrepiento. Ser obsesivo con una pasión es lo que nos hace diferentes, podrías estar leyendo la bio de otro artista, pero estas acá. Desde Marzo de 2020 hasta hoy, no pasó un día en que yo no halla hecho algo para alimentar mi arte.
No me arrepiento de mi camino tampoco, pasar por otros trabajos, te otorga más herramientas. Saber manejar un cliente difícil, hablar ingles, programar maquinaria, bordar, lustrar un par de zapatos.. parece un chiste, pero todo eso sigue siendo útil.
Si estas leyendo esto, y necesitas un giro de timón, quiero que veas que se puede.
(Sí, con hijos también, tengo una 😅 )